Mientras que las Tartelettes Amandine clásicas presentan un simple relleno de crema de almendra, hay muchas maneras de personalizar este dulce para adaptarlo a tus preferencias. Por ejemplo, puedes incorporar diferentes sabores en la crema de almendra añadiendo ralladura de cítricos, como naranja o limón, o incluso mezclando otras pastas de nuez, como avellana o pistacho. Además, podrías considerar incorporar frutas de temporada, como peras poché o bayas, para un toque frutal. Usar diferentes tipos de licores, como Frangelico o Grand Marnier, puede mejorar aún más el perfil de sabor. Para una experiencia más decadente, rocía caramelo o salsa de chocolate sobre las tartaletas terminadas o cúbrelas con crema batida fresca.