El cheesecake de San Sebastián, también conocido como 'Cheesecake Quemado Vasco', es un postre único que se origina en la región vasca de España, específicamente en San Sebastián. A diferencia de los cheesecakes tradicionales que generalmente se hornean a temperaturas más bajas para lograr una parte superior suave, este cheesecake tiene un exterior caramelizado y ligeramente quemado, creando una estética rústica que es tanto visualmente atractiva como rica en sabor. El interior permanece cremoso, suave y casi como un flan, creando un contraste fascinante con la textura exterior. La incorporación de jugo de limón en esta receta añade un toque refrescante que equilibra la riqueza del queso, convirtiéndolo en un delicioso manjar que es más indulgente que sus contrapartes más convencionales. Esta combinación excepcional de textura y sabor ha contribuido a su creciente popularidad entre los entusiastas de los postres en todo el mundo.