Si te sobran panecillos de chocolate (aunque es difícil resistirse a ellos), guárdalos en un recipiente hermético para mantener su suavidad. A temperatura ambiente, estos panecillos generalmente se mantendrán frescos durante aproximadamente 2 a 3 días. Si deseas que duren más, considera refrigerarlos, pero ten en cuenta que esto puede cambiar ligeramente su textura, haciéndolos más firmes. Para una frescura óptima, también puedes congelar los panecillos. Para hacerlo, envuelve cada panecillo firmemente en plástico, seguido de una capa de papel aluminio, asegurándote de que no entre aire que comprometa su textura. Los panecillos congelados pueden durar hasta 3 meses. Cuando estés listo para disfrutar, simplemente descongélalos a temperatura ambiente o caliéntalos brevemente en el horno para restaurar su deliciosa suavidad.