¡Absolutamente! La belleza de estos rollos radica en su versatilidad. Mientras que la receta destaca la mermelada de fresa como el relleno principal, puedes personalizarla fácilmente para adaptarla a tu gusto o preferencias dietéticas. Para una variación, puedes probar otras conservas de frutas como mermelada de frambuesa, arándano o albaricoque, que le darán a cada rollo un giro único. Para una opción más decadente, considera agregar una capa de queso crema mezclado con ralladura de limón o azúcar glas, que complementa la dulzura de cualquier relleno de fruta. Alternativamente, para un enfoque más salado, podrías explorar el uso de mantequillas de nuez o incluso crema de chocolate, creando rollos que pueden deleitar a una variedad más amplia de paladares.