Aunque el clásico pastel marmoleado es delicioso tal como está, hay múltiples formas de realzar el perfil de sabor. Por ejemplo, puedes incorporar diferentes extractos de sabor como almendra o naranja para un giro único. Alternativamente, agregar una capa de puré de frutas como frambuesa o fresa a la masa puede proporcionar un contraste refrescante con el rico chocolate y vainilla. Para una textura divertida, considera mezclar chispas de chocolate, nueces o incluso remolinos de queso crema para un sabor rico y ácido. Para un toque estacional, prueba agregar especias como canela o nuez moscada para un sabor acogedor, o incorporar puré de calabaza en otoño. Cada variación puede elevar tu pastel marmoleado mientras mantiene su encanto original.